Creo que es la primera vez en todos mis años de “carrera literaria” que no me siento escritor. Se acerca el día del libro y la Feria del Libro de Madrid y no tengo ninguna propuesta para nada. Hace casi un año que se publicaron mis dos últimas novelas (cuyas editoriales dejaron morir antes de que se publicaran) y no tengo ninguna publicación pendiente, pero no por no tener nada escrito, porque estoy moviendo hasta cinco manuscritos, sino que no obtengo ninguna respuesta.
Estoy escribiendo lo que puede ser mi mejor trabajo y mi carrera está muerta. Podría decir que es frustrante, que estoy triste, pero no es así, porque después de años de desplantes y desilusiones simplemente este es el desenlace natural. No me da igual, pero tampoco tengo la motivación suficiente como para que esto me haga venirme abajo.
¿Puede cambiar la cosa? Claro, siempre puede, pero he aprendido a que no está en mi mano y que hay muchos factores que hacen que unos lo consigan y otros no. La calidad literaria no es uno de esos factores, eso lo tengo muy claro.
Será que estoy viviendo una época de mi vida en la que me siento más en paz conmigo mismo y las cosas me las tomo de otra forma. Ya no me afectan tanto.
No sé si servirá de algo, pero voy a seguir escribiendo mientras el cuerpo me lo pida. El día que deje de pedírmelo, dejaré de hacerlo.