Proyectos literarios, musicales, y sueños rotos.

Hoy damos por finalizado el proyecto Puedo Cantar Reworked grabando la última canción, Qué Voy A Hacer, con un tono nuevo y nuevos arreglos finales. La semana pasada hicimos No Me Estoy Cayendo, también con un tono nuevo. Ya están todas las canciones para poder relanzar mi primer álbum con el sonido y la voz que yo andaba buscando. Ahora sí que va a sonar como yo quería. No me arrepiento de nada, aunque claro, cuando las cosas ya han pasado, siempre te dices que si volvieses atrás lo harías de otra forma, pero eso se dice cuando ya se saben los resultados. Sobre la marcha uno va actuando según sus instintos, así que por eso no me arrepiento, pero ahora va a sonar todo en su sitio.

Tengo algunas bases preparadas para el tercer álbum, pero hoy conversando con Jorge, de MaintrackStudio, hemos llegado al acuerdo de hacerlo producido todo entero por él, lo cual le va a dar la dimensión y la grandeza que necesito ahora que ya estoy preparado para dar un paso más. Lo que me faltan son grandes producciones y eso me lo puede dar él.

Mi segundo álbum, Como La Primera Vez, suena muy bien, pero le falta ese empujón de producción que yo, sin conocimientos, no puedo o, al menos, ahora mismo no sé darle a la música. Por eso prefiero hacer menos canciones, pero que sean todas grandes.

Con lo que tengo preparado seguramente haga algo, pero no sé qué. Puede que prepare un EP antes del tercer álbum, no lo sé. Lo que sí sé es que voy a grabar alguna canción más de las mías. Ya veremos qué hago con ellas.

Este domingo estrené mi nuevo videoclip, de la canción Déjame en Paz, con imágenes de la sesión de fotos inolvidable que le hice a las chicas de Susana Guerrero en su academia de burlesque Miss Mambo. De momento está gustando mucho.

En cuanto a la literatura, ya se ha desvelado la novela que me van a publicar el próximo quince de mayo y qué editorial va a ser. La semana pasada vi que Harlequin (sello de HarperCollins) había puesto ya la portada en la página de la novela en su web. Hasta ahora se podía ver la página, pero sin la portada, por eso aún no lo había hecho público. Ahora ya lo he contado y publicado en redes, con esa portada en la que se ve la foto que le hice al wiccano. También hoy se puede reservar en Amazon.

La novela se titula “La distracción perfecta” (título que se cambió porque a la editorial no le gustaba el original, que era “Un verano aburrido”, supongo porque una novela con la palabra “aburrido” en su título es poco comercial). Mi regreso a la novela LGTB va a ser solo digital, lo que lo ensombrece un poco, pero al menos ando aumentando currículum y haciendo cosas.

Sigo sin saber absolutamente nada de las otras dos novelas que me van a publicar, una de ellas en teoría dentro de un mes, pero ya veo que no, porque no daría tiempo, por lo que este año ya me imagino que no iré a la feria del libro, ya que se iba a estrenar allí.

La novela que estoy escribiendo ahora sobre el bullying en los institutos dentro del mundo LGTB va muy bien, aunque por momentos me hace recordar momentos muy desagradables y negativos, pero se trataba de eso, de sacar fantasmas de dentro y, si puedo poner mi granito de arena concienciando sobre la igualdad, mejor que mejor.

Hoy he ido a imprimir las treinta mil palabras que llevo escritas, porque quiero darle un pequeño giro. Iba a estar ambientada a mediados de los dos mil, pero la voy a traer a la actualidad, por lo que la cosa cambia mucho, ya que ahora los jóvenes tienen las redes sociales y todos hemos introducido el móvil en nuestras vidas como una herramienta imprescindible en nuestro día a día.

Sigo muy entretenido, aunque cada vez estoy más cansado de perseguir sueños y buscar una oportunidad que, una vez tras otra, se me es negada. Últimamente estoy pensando que esa oportunidad puede que jamás llegue, por lo que algún día, simplemente, deje de intentarlo.

Sí, estoy un poco negativo.

Author: Javier Herce