Nos pasamos la vida pensando en todo lo que no nos gusta de nosotros mismos, de nuestro físico, y lo que nos gustaría cambiar. Perdemos el tiempo y la energía que podríamos usar para aceptarnos, vivir tranquilos, ser más felices y valorar las cosas verdaderamente importantes, como la vida que tenemos, por ejemplo.
Yo soy así. Podría ser de muchas maneras diferentes, pero es así como soy y no se puede ni quiero cambiar. Demasiados años luchando contra el espejo como para no disfrutar un poco de la vida, ¿no?
La felicidad nunca es completa, siempre nos va a faltar algo, pero en nuestra mano esta vivir más tranquilos.